Sumamos una nueva entrega a este melodrama que tiene en vilo a la mitad de Glasgow y en pasiva felicidad a la otra. Como ya habíamos dicho antes hay muchos que sostienen la imposibilidad de un fútbol escoces sin la presencia del Old Firm Derby. Entre estos defensores de la vieja empresa se encuentra el Primer Ministro Escocès Alex Salmond quien tiene el caso Rangers en la agenda política a la par de temas tan importantes como el próximo referéndum sobre una mayor autonomía de Escocia frente al Reino Unido.
El futuro como club de fútbol del Glasgow Rangers, que entró en suspensión de pagos el pasado martes, no peligra, según afirmaron hoy los nuevos administradores de la entidad.
"Tras una evaluación preliminar, confiamos plenamente en que el Rangers seguirá existiendo como equipo de fútbol. No creemos que la liquidación o el cierre del club sea un final probable", dijo Paul Clark, de la firma londinense "Duff and Phelps", que asumió la administración de la institución desde que entró en suspensión de pagos.
"Entendemos lo que significan los 140 años de historia del Rangers y estamos trabajando para que esta historia perdure", explicó el administrador, que apuntó el interés de varios inversores en el club. Aunque no detalló la situación financiera del actual campeón escocés, Clark indicó que deberán llevar a cabo una revisión del personal, incluidos los jugadores, para poder sobreponerse a las dificultades económicas.
Clark, que esta mañana explicó la situación a la plantilla y el entrenador de los Rangers, no detalló si esa revisión implicaría despedir a parte del personal, aunque aseguró que todas las nóminas del mes de febrero se van a pagar con normalidad.
En los próximos días, "Duff and Phelps" publicará un informe detallado sobre la situación económica del club. El equipo más lealista de Escocia está a la espera de una decisión judicial que podría acarrearle un coste de 75 millones de libras (más de 90 millones de euros) que, según Clark, no implicaría el cierre del club. Resulta irónico que los unionistas estén al borde del colapso porque la oficina de aduanas e impuestos de la reina quiera cortarles la cabeza.
La entrada en suspensión de pagos supuso para los huns una sanción de 10 puntos en la SPL que lo deja a 14 de su rival histórico y líder del campeonato, el Celtic, cuando se llevan disputadas 26 jornadas del torneo. Sobre las posibilidades de un fútbol escocès sin los huns existen muchas teorias. Por un lado los Clubes, Rangers tirando manotazos de ahogado pide que sea rescatado. Celtic mas rebelde que nunca sostiene que es capaz de sobrevivir sin su rival histórico.
El peligro mas inminente lo presenta el negocio que hay alrededor de este evento deportivo. Los diarios pro Rangers, que son la mayoría, dejarían de vender un gran numero de periódicos deportivos. La televizacion perdería publicidad y la SPL deberá rebajar su cotización. Esto sin hablar de los miles de trabajos indirectos que mueve el fútbol cada domingo.
Por ultimo, y no menos importante, la influencia política que tiene el equipo unionista mas importante del Reino Unido en la sociedad escocesa como un verdadero porta estanderte de la presencia Británica en el norte. Rangers es hoy la principal herramienta propagandística del imperio británico en Escocia e Irlanda irradiando semana a semana con simbologia pro monarquica y conservadora.
Seguiremos esta novela con atención y veremos cuanto espera el establishment para salvar a su equipo predilecto de las manos mismas de la extinción definitva.
